
«Paranormal activity: the marked ones» (Los Marcados): ahora, cámara en mano estilo «tex-mex»
Lo primero que hay que saber de esta «Paranormal activity» es que no es la quinta entrega. Los sucesos que aquí suceden tienen lugar después de la cuarta, pero habrá, hacia fines del 2014, una nueva entrega de la franquicia que continue los hechos en línea «cronológica», por decirlo de alguna manera.
Los responsables de esta «The marked ones», son los mismos de la productora que lleva adelante estos proyectos (Oren Peli sigue firmando). Christopher Landon ocupa la dirección, hombre de la casa que ha escrito y guionado la saga desde la segunda entrega. Es importante destacar, que esta no es un «spin-off» (en algún momento se filtró esto en las redes y es incorrecto) y que sí, hay alguna sorpresa para los fanáticos que siguen el desarrollo de las historias de los personajes que no podemos revelar así que prestar mucha atención al final (ya lo descubrirán!).
«Los marcados» tiene lugar en Oxnard, California. HandyCam en mano (si este recurso no estaríamos en una PA no?), conoceremos a Jesse (Andrew Jacobs) y a su mejor amigo Héctor (Jorge Díaz), quienes terminan otro año escolar. Viven y se mueven en una comunidad eminentemente latina y al poco de comenzar la cinta, sabemos que están de vacaciones.
En el condominio donde viven, los amigos son testigos de movimientos extraños en la casa de una vecina que parece estar involucrada en magia negra. Al poco tiempo en ese departamento tiene lugar un crimen y allí es donde la trama comenzará a tomar temperatura… Jesse y Héctor comienzan visitas exploratorias a la casa de «la bruja» para tratar de entender qué cosas sucedían en ese lugar. La respuesta, no tardará en llegar…
El oscuro secreto implica adentrarse en una trama compleja, donde la hechicería y los rituales demoníacos, están a la orden del día. «The marked ones» aprovecha el espíritu latino y deja que el ritmo fluya sin mayores problemas. Esta cuestión (yo le digo, el enfoque «tex-mex») permite que el film gane en naturalidad y se muestre menos acartonado que los anteriores.
Hay que decir, sin embargo, que las «Paranormal activity» fueron una sorpresa en su tiempo pero ya al llegar al quinto film (sexto si considerás «Tokyo Night» dentro del tronco central) se nota cierta fatiga en los elementos que aparecen como característicos. «The marked ones», en cambio, busca profundizar algunos y se aleja de otros. Intenta estrategias nuevas…
Construimos el suspenso desde una mayor cantidad de elementos (el sótano, la subtrama de los delicuentes, la identificación de la marca para el ritual, los poderes que desarrolla Jesse, etc) y abandonamos los tramos largos de observación vía cámara fija. Salimos de la noche y tomamos el día, corporizamos el miedo a través de personajes físicos. Funciona? A ver, como espectador, esta idea se instala más naturalmente en el público y le da cierto aire a la cinta.
Si bien está lejos de conformar un relato de terror tradicional, entretiene y no juega tanto con las notas de color como las anteriores… En cierta manera, la saga se pone un poco más precisa, busca su rumbo dentro de una línea más clásica y ofrece al espectador un film de terror clase B, bien hecho. Es importante que sepan que si no les atrae el género o el estilo found footage o cámara en mano, no deberían ni acercarse a sala.
En general, esta es una serie que tiene un importante público cautivo en adolescentes y jóvenes y a ellos está dirigida. No descolla ni es original, pero es mejor que la anterior, seguro. Ideal para disfrutar burrito en mano y con una Corona recién destapada…
Anexo de Crìtica por Rolando Gallego
Con sabor latino llega esta nueva entrega de la exitosa saga “Actividad Paranormal”, titulada en este caso “Los Marcados”(USA, 2013). Bajo la dirección de Christopher Landon (productor y guionista de “Paranoia” o la serie de TV “Dirty, Sexy Money”) en esta oportunidad la secuela (ya la número 5) se centrará en dos jóvenes amigos (Héctor -Hector Díaz- y Jesse -Andrew Jacobs-) obsesionados por una vecina a la que llaman “loca” y cómo se inmiscuirán en un caso paranormal.
Recién egresados del secundario, y sin otro plan más que no hacer nada, los amigos (a los que también se suma una muchacha llamada Marisol) pasan sus días escuchando música, bailando y fumando sustancias ilegales. Pero del departamento de Ana (la vecina) siempre se escuchan ruidos y gritos extraños a toda hora, por lo que los amigos(una especie de Beavis and Butthead humana) decidirán investigar introduciendo cámaras a través de las ventilaciones de la vivienda y el resultado los atraerá Hay otro compañero, llamado César (Carlos Pratts), graduado con honores, el mejor alumno, que inexplicablemente se ve involucrado en el asesinato de la vecina.
Y en ese punto comienza otra película, una de irrefrenable deseo de conocer una verdad que no es revelada (la de los marcados) pero también una de “desafío a la muerte”, símil la serie argentina “El Garante”, y que se inicia cuando Jesse descubre que puede arriesgarse a realizar acciones que ponen en juego su vida y nada le sucede.
También hay un poco de “La metamorfosis”, porque su cuerpo comenzará a atravesar cambios que lo irán alejando de sus amigos y que expondrán una realidad rodeada de brujas y de niños elegidos al nacer. Landon construye una película que por momentos divierte más que asustar (mucho gag en el medio y sketches al estilo “Jackass”) y que encuentra en el recurso de la cámara en mano y los movimientos vertiginosos o cortes abruptos de la imagen, un intento por seguir construyendo un verosímil de “realidad” que a esta altura de la saga no es creíble.
Anteriormente, al menos, se cuidaba que las imágenes mediatizadas por la cámara funcionaran como mínimo como un reflejo que provenía de una cámara de video, pero ya ni eso. Los protagonistas poseen el carisma necesario para sostener la película, una película que cuando toca tópicos universales como: el sexo en la adolescencia, la amistad entre jóvenes, las fiestas, la exclusión y el bullying, como así también la lucha por ser “distinto” y a la vez conseguir reconocimiento entre pares, es mucho más potente que cuando busca asustar.
De antología la ouija SIMON y algunos efectos para mostrar los cambios que va atravesando Jesse. No hay mucho más que eso en esta nueva saga que sigue sumando adeptos.