«Cabrini»: una mujer excepcional

«Cabrini» es la nueva producción de Angel Studios. Esta productora es conocida por estar detrás de los dos hits cristianos más mediáticos de los últimos años: «Sound of freedom» (aunque su temática no sea estrictamente religiosa) y la serie «The Chosen», que se está estrenando en su cuarta temporada directamente en cines.

Es muy interesante ver como surge una nueva corriente cinematográfica que enfoca en la vida de las personas desde la fe. Hasta este tiempo, el cine «cristiano» era sinónimo de bajo presupuesto, ideas muy básicas y actuaciones lavadas, sin fibra. Excepto la saga «God is (not) dead», que tampoco fue un gran producto (siempre hablamos del género), el resto no funcionó en salas y fue a circuitos de distribución menores.

Pero… una nueva época inicia y Angel Studios logró establecerse como un grupo de gente que viene del medio y está dispuesta a crecer en el medio. «Cabrini» es una película que cualquier estudio importante podría producir. Es un drama biográfico bien contado, con sobresalientes rubros técnicos y actuaciones sólidas e intensas.

Para quienes no conocen a Francesca Cabrini, una monja italiana que dedicó su vida a ayudar a los más necesitados. Ella es la primera ciudadana norteamericana canonizada por la iglesia católica en su historia. La película no solo narra su historia, sino que también explora el significado de la fe, la esperanza y el sacrificio en un momento histórico central para la vida de Nueva York (1899), en el cual los inmigrantes sufrían un trato distante y cruel por parte de los nativos, en territorio local.

Cabrini es italiana y llega al nuevo mundo dispuesta a realizar sus sueños. Sin embargo, pronto se dará cuenta que distintas y graves problemáticas hacen muy difícil la vida de niños e inmigrantes en un contexto de indiferencia y corrupción, doloroso. Su lucha será contra todo y contra todos fue leyenda y el relato presentado lo describe con detalle.

Cristiana Dell’Anna lleva adelante a la aguerrida y heroica Cabrini, en una cruzada por enfrentar los poderes masculinos y la lucha escolástica a un alto nivel. Es toda intensidad y carisma. Su personaje es magnético y lidera no sólo a su comunidad, sino también conecta con la audiencia de una forma potente y sostenida. 

Esta cinta abrió el Día Internacional de la Mujer en muchos países. Claramente, Cabrini es un personaje fascinante, frágil (los médicos anticipaban una muerte temprana para ella), pero a la vez dotado de una energía mística y una convicción, única.

Desde el costado técnico, es un laburazo de Angel Studios. La reconstrucción de la época es consistente, la banda de sonido acorde (aunque un poco intensa, en algunos tramos) y las actuaciones de los secundarios, ajustadísimas: David Morse y John Litgow se llevan las palmas.

Sorprende nuevamente Alejandro Monteverde, llevando adelante una peli con valores movilizantes, en un tiempo en que esta inspiración, es necesaria.