«Ratatouille»: un clásico que perdura en nuestro paladar
Recuerdo el día de la película, sacando las entradas, esperando el ingreso, esperando el comienzo acompañado de mi familia. Comenzó la película y se entabló mi asombro, un asombro único lleno de conmoción a medida que el rodaje daba paso tras paso.
Ratatouille es “La película” gastronómica, ustedes dirán ¿Cómo?… es una película para niños, es verdad pero detrás de ese film animado hay más que una simple película, hay todo una historia y un proceso para llegar a semejante éxito.
Primero quiero contarles que esta película es mi favorita la cual he visto algo así como cuarenta veces y no me canso de verla. El motivo es que mas allá de los personajes y la historia, el film muestra con lujos de detalles como es un restaurante netamente francés, como es la cocina, como es el mundo gourmet, como es cada uno de los individuos que trabajan en ella y como son sus comensales, sus clientes, hasta como son los proveedores y los departamentos de controles sanitarios. Esta película es magia pura y es perfecta, mas aun para aquellos que son gastronómicos y trabajan en gastronomía. A medida que rodaba cada vez el sentimiento de similitud de varios pasos de mi carrera eran increíblemente parecidas a varias de las escenas del film.
Te preguntaras ¿como es esto? Te cuento que detrás de todo se encuentra un grupo de cineastas que para poder trabajar en la película debieron realizar cursos de cocina, y trabajar en las mismas, esto se debe a que es la única forma de poder descubrir el mundo gourmet y poder plasmarlo en el trabajo individual de cada uno de ellos.
Pero, la idea no es extenderme tanto en tecnicidades, las cuales dejo para nuestro gran amigo Rodrigo que es él quien conoce mejor que nadie los pormenores de este film.
Como el nombre de la película lo indica, todo ella gira en torno a esta receta maravillosa la cual es recreada de una manera única. Es increíble como de verdad se puede sorprender con un plato a cual muchos llaman simple, que de tan simple es exquisito, tanto que en la cocina todos se asombran cuando “Remy” decide prepara la misma para sorprender al terrible crítico gastronómico “Anton Ego”. Tanto “Linguini” como “Colette” tanbien quedan estupefactos por esta receta que Remy prepara con una facilidad única. A llegar el plato a la mesa y bajo la presión terrible que ocasionaba la degustación de Anton, todos estaban petrificados, tal cual como quedo petrificado el mismo Anton al probar el primer bocado el cual lo transporto a su infancia donde su madre cariñosamente le preparaba este manjar el cual quedo grabado en su subconsciente a través de los años; y que Remy despertó en un solo bocado. Aquí queda demostrado que todo aquello que parece simple puede despertar emociones únicas y fantásticas, resurgir recuerdos y disfrutar de ellos.
De esta manera mis queridos amigos les dejo esta linda receta para disfrutar con la familia.
Ratatouille.
Ingredientes:
Berenjenas: C/N
Zuchinnis: C/N
Cebollas: C/N
Tomates peritas: C/N
Extras:
Tomates sin piel, ni pepitas: C/N
Morrón rojo asado: C/N
Ajos: C/N
Aceite de oliva: C/N
Pasta de tomate: C/N. (Se consigue en latitas, recomiendo la triple)
Tomillo: C/N
Albahaca: C/N
Perejil: C/N
Papel aluminio.
Elaboración:
En una sartén saltear los ajos y agregar los tomates procesados con los morrones asados y la pasta de tomate, cocinar por 15 minutos y espumar. Agregar las hierbas y apagar el fuego. Salpimentar. Reservar.
Cortar los tomates peritas, las cebollas, las berenjenas y los zuchinnis en rodajas. En una fuente para horno colocar en el fondo la salsa de tomate. Agregar los vegetales superpuestos intercalando los mismos. Rociar con aceite de oliva, sal, pimienta y colocar papel de aluminio, llevar a horno precalentado 180º 20 minutos. Servir
NOTA: Estos son los ingredientes tradicionales de esta preparación. Pero, siempre tengo un pero, en mi caso particular, suelo agregarle lo siguiente lo cual recomiendo.
En la base de la fuente coloco finas laminas de jamón crudo, luego las salsa de tomates, los vegetales tal cual he explicado en los pasos anteriores, luego agrego aceitunas negras picadas, tapo con papel aluminio y llevo al horno, retiro, espolvoreo con queso parmesano y gratino. Les juro que es algo exquisito, a pesar de dejar de ser la ratatouille clásica.
A disfrutar que de eso se trata, saludos del alma, Adolfo.
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