«Le Comte de Monte-Cristo»: Dumas, nuevamente reversionado

La novela de Alejandro Dumas, «El Conde de Montecristo», es un clásico de la literatura que ha sido adaptado innumerables veces al cine y la televisión. La versión de 2024, dirigida por Alexandre de La Patellière y Matthieu Delaporte, presenta una nueva visión de esta historia de venganza, amor y redención.

Ámbos directores ya han trabajado juntos en el último tiempo, con algunos éxitos de taquilla en Francia tales como «Le prenom» y «Le meilleur reste à venir», ámbas estrenadas aquí.
La película rinde, como es esperable, un homenaje respetuoso a la obra original de Alejandro Dumas, conservando la esencia de la trama: la injusta encarcelación de Edmond Dantès, su escape, y su elaborada venganza contra aquellos que lo traicionaron.

Sin embargo, esta adaptación se distingue por su enfoque más íntimo y psicológico, profundizando en los traumas y motivaciones de los personajes. Esta versión gira poderosamente sobre el eje que Pierre Niney exhuda. Su Edmond es un animal herido. Con todas las letras. Pero a pesar de la tremenda energía que presenta para caracterizar el dolor sufrido por la traición y el engaño, el gran actor galo deja espacio para sumar algo de misterio e ingenio a la hora de obtener su revancha personal…

Debe decirse que para los estándares del cine francés, «Le Comte de Montecristo» es una producción de gran envergadura (costó arriba de 40 millones de euros). Las locaciones exóticas, los suntuosos vestuarios y la dirección artística transportan al espectador a la Francia del siglo XIX. Pero para subir la apuesta, la cinta guarda algunas sorpresas en relación a dispositivos e intrigas que vale la pena descubrir.

La historia sigue a Edmond Dantès (Niney), un joven cuyo destino cambia drásticamente cuando es falsamente acusado de traición. A punto de casarse con la mujer que ama (Mercedes, jugada por Anaïs Demoustier), es encarcelado en el Castillo de If, donde como todos sabemos, Edmond descubre un tesoro, un amigo y una posibilidad de escape. Al regresar a la sociedad como el enigmático Conde de Montecristo, se dedica a desenmascarar a sus enemigos y hacerlos pagar por sus crímenes, aunque esta vez con algo de estilo y cierta crudeza original, en relación con versiones anteriores.
Pierre Niney ofrece una interpretación conmovedora y compleja de Edmond Dantès, capturando la evolución del personaje desde un joven inocente hasta un hombre consumido por la venganza. El cast acompaña con solvencia, dejando lugar para que Niney se luzca de gran forma.

A diferencia de algunas adaptaciones anteriores que han enfatizado la acción y la aventura, esta versión de «Le Comte de Montecristo» se centra, con convicción, en el drama psicológico de los personajes. La película explora las consecuencias de la venganza, la pérdida y la traición, dejando poco espacio para las típicas escenas de espadas y persecuciones. No habrá muchos duelos pero si, un escenario orquestado para cobrarse el mal recibido.
«Le Comte de Montecristo» (2024) es una adaptación digna de la novela original, que combina respeto por el material fuente con una visión fresca y contemporánea. La película es un buen ejemplo de lo que el cine galo puede alcanzar cuando se enfoca en personajes clásicos. Si sos fan de la obra de Dumas, éste es un plato apetecible. Sin dudas.


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