«Love Actually»
Seguramente que esta es la comedia romántica coral por excelencia. No recuerdo ninguna que en la que los cinéfilos acordemos, como lo hacemos con «Love actually». Para que se den idea, los que aún la discuten, costó unos 40 millones de dólares y al año había multiplicado la ganancia por 6. Globalmente fue un fenómeno y lo curioso es que se lanzó de manera limitada, allá por noviembre de 2003 cuando quizás algunos la esperaban hacia las semanas previas a la Navidad. No fue impedimento esto para que «Realmente amor» arrasara con la taquilla, hecho sorprendente también porque su espíritu es más británico que americano, a pesar de que su cast es mixto y en los Estados Unidos el acento cerrado mucho no gusta.
Pero hay más.
La dirigió un inglés llamado Richard Curtis, guionista de muchísimos éxitos (la primer «Bridget Jones», «4 weddings and a funeral» entre muchas otras) en el Reino Unido pero que curiosamente dirigió solo dos películas más. «Love actually» fue su ópera prima. La segunda, muy divertida y original, pero ostensiblemente menor y local, fue «Pirate Radio», en 2009, acerca de un caso real de una radio ilegal que funcionaba en alta mar. El hombre detrás de las cámaras de esta enorme rom com coral, NUNCA volvió a filmar algo similar. No es muy loco?
Desde hace 8 años, la industria se acostumbró a lanzar productos con multitud de estrellas tratando de emular aquel éxito, pero nunca el mismo nunca se repitió.
Por qué «Love Actually» es la peli para esta época del año?
En ella, hay 12 relaciones amorosas, de diversa intensidad. Hay romances de niño-niña, triángulos varios, amores no correspondidos, amistades que se celebran como si lo fueran… Pero lo fuerte son algunos personajes que quedaron en la memoria colectiva del público: un Primer Ministro británico que parece no entender el lugar en el que está (memorable despistado jugado por Hugh Grant), un cantante al que solo le importa el dinero que hace un desnudo inesperado (Billy Mack), un escritor llamado Jamie que en su retiro para terminar una obra se enamora de alguien en otro país con quien no se entiende por dificultades idiomáticas (Colin Firth) … Ellos y muchos otros (la pareja que filma porno y terminan arreglando para ir a tomar un café a la salida del trabajo!!) forman un abanico muy colorido que representa diversas maneras de acercarse al amor cuando la Navidad se aproxima.
Todos vivimos estos días como momentos de reencuentro y la película logra mostrar a sus personajes en sus lados flacos (sus errores, fundamentalmente), pero los ennoblece al rescatarlos a todos en los instantes de cierre de trayecto cuando marca resoluciones convincentes para cada uno de los involucrados.
«Love Actually», por otra parte, tiene una soundtrack increíble. Suenan nada menos que 55 tracks, de los cuales por lo menos 20, han sido enormes éxitos radiales. Recordás «Jump» por las Pointer Sisters cuando Hugh Grant baila solo en su residencia? O aquella bellísima versión que interpreta la pequeña Olivia Olson: «All I want from Christmas» en la fiesta de cierre de su escuela?
Pero la que traemos para esta sección, es la que más recordamos. Por el desenfado de Bill Nighy jugando a estrella del pop reventada, que sólo ama el dinero y llegar a la cima de los charts aprovechando una vieja canción en versión retocada.
Feliz navidad para todos desde esta sección, recuerden «Christmas is all around»
Christmas.Is.All.Around por Anthony-54